domingo, 1 de abril de 2012

Amnistía fiscal

Creo que fue en el año 91, cuando el señor Solchaga promovió la última amnistía fiscal en este país. Veníamos de una situación económica y financiera complicada, (hasta los pagarés del tesoro eran opacos al fisco) y se nos convenció de que había que poner un punto y final a todo aquello, en aras de una mejora de la economía y del propio País. Ahora, 21 años después, este flamante Gobierno, con una mayoría absoluta importante, toma sus decisiones para tratar de sacarnos de la penuria donde nos ha dejado metidos los ocho años del Sr. Zapatero.

Hay medidas que se toman, que pueden ser discutibles: La subida de impuestos, la reforma laboral...Hay medidas que gustarán más o menos, con las que se estará más o menos en desacuerdo, pero que al fin y al cabo entran dentro de lo que es opinable en función de información, creencias o ideología. Pero hay una medida, como es la Amnistía Fiscal, que sencillamente es inmoral. En las democracias modernas, Europa y Estados Unidos, el principio de contribución a los gastos comunes del Estado, es fundamental e irrenunciable. TODOS , en base a sus posibilidades, deben de contribuir al sostenimiento del estado común. Unos países serán más sociales. Otros lo serán menos. Pero en todos, el pago de impuestos es sagrado, dentro de su sistema normativo. 

Ahora este Gobierno plantea una amnistía fiscal, que sin duda será legal porque la ampararán las leyes, pero que a todas luces es inmoral porque unos señores que han estado defraudándonos, robándonos a todos, ahora se van de rositas, pagando su diez por ciento. En aras de un pragmatismo económico, seguimos siendo un país bananero. ¿Qué le decimos a las personas que todos estos años han pagado religiosamente sus impuestos? ¿A toda esa base de trabajadores que mes a mes ven cómo se escapa de su nómina una parte de sus ingresos sin conocer muy bien a qué se destinan?.

No siempre todo vale, ni el fin justifica los medios. Hay cosas que sencillamente no se pueden hacer. El gobierno con esta medida, está lanzando el mensaje a la ciudadanía, para que a partir de ahora vuelva a defrudar. Dentro de unos años aparecerá un Sr. Rosell de turno, pidiendo otra amnistía fiscal y algún gobierno, afín y obediente, le hará caso.

Se pongan como se pongan y recauden lo que recauden, esta medida es inmoral. ¿Porqué no pedimos a los asesinos de ETA que paguen un 10% y le damos otra amnistía por sus asesinatos?. Aunque pensándolo bien, no daré ideas....