lunes, 26 de marzo de 2012

Mali

La pasada semana se produjo un golpe de estado en Mali. Algo que, para los que vivimos en este mundo tan desarrollado, nos suena casi normal. Mali suena a Africa, a subdesarrollo, a pobreza, a hombres negros. Mali suena a lejanía. A algo muy distante a nosotros. Algo, cuya situación ni nos va ni nos viene. De hecho, para saber que tiene fronteras con Argelia, Mauritania, Guinea, Burkina Faso y algunos países más del centro de Africa, he tenido que buscar su situación en internet. 

Probablemente el hecho del golpe de estado en este país, hubiera pasado como una de tantas noticias que a veces oyes en el carrusel de los informativos de cualquier cadena de radio o televisión. Pero resulta que Mali no es un país normal para mí, ni para algunos amigos cercanos. Cuando decides someterte a un embarazo adoptivo, una de las primeras dificultades con las que te encuentras es la elección del país de tu hijo. De pronto se te abre un amplio abanico de países entre los que puedes escoger. La incertidumbre y la duda se instalan en tu barriga porque no puedes fallar. Puedes elegir los que quieras, pero cada país es un expediente diferente y cada expediente son costes y dinero. Y cada uno lleva su propia carga de preocupación. 

Mis amigos eligieron Mali. Parecía que el país no era especialmente complejo en el proceso de la adopción y que el chiquillo podría venir relativamente rápido. El golpe de estado probablemente habría frustrado este embarazo. Afortunadamente no ha sido así. La naturaleza hizo el milagro y el embarazo físico está en su sexto mes. Ojalá las parejas que eligieran Mali en su día tengan la misma suerte y su embarazo culmine con éxito.

Mali

La pasada semana se produjo un golpe de estado en Mali. Algo que, para los que vivimos en este mundo tan desarrollado, nos suena casi normal. Mali suena a Africa, a subdesarrollo, a pobreza, a hombres negros. Mali suena a lejanía. A algo muy distante a nosotros. Algo, cuya situación ni nos va ni nos viene. De hecho, para saber que tiene fronteras con Argelia, Mauritania, Guinea, Burkina Faso y algunos países más del centro de Africa, he tenido que buscar su situación en internet. 

Probablemente el hecho del golpe de estado en este país, hubiera pasado como una de tantas noticias que a veces oyes en el carrusel de los informativos de cualquier cadena de radio o televisión. Pero resulta que Mali no es un país normal para mí, ni para algunos amigos cercanos. Cuando decides someterte a un embarazo adoptivo, una de las primeras dificultades con las que te encuentras es la elección del país de tu hijo. De pronto se te abre un amplio abanico de países entre los que puedes escoger. La incertidumbre y la duda se instalan en tu barriga porque no puedes fallar. Puedes elegir los que quieras, pero cada país es un expediente diferente y cada expediente son costes y dinero. Y cada uno lleva su propia carga de preocupación. 

Mis amigos eligieron Mali. Parecía que el país no era especialmente complejo en el proceso de la adopción y que el chiquillo podría venir relativamente rápido. El golpe de estado probablemente habría frustrado este embarazo. Afortunadamente no ha sido así. La naturaleza hizo el milagro y el embarazo físico está en su sexto mes. Ojalá las parejas que eligieran Mali en su día tengan la misma suerte y su embarazo culmine con éxito.